Nuestros empleados

Reclamando gastos en el desierto

¿Quién hubiera pensado que un mantenimiento rutinario de antena en el desierto colombiano se convertiría en una cuestión de vida o muerte?

En setiembre del 2018, dos de nuestros empleados de Rohde & Schwarz Colombia partieron a un viaje de trabajo para realizar el último mantenimiento a un sistema de antenas recientemente implementado en el desierto colombiano. Lo que el ingeniero de aplicaciones y el técnico no sabían en ese momento: era una viaje que no olvidarán pronto.

¡El desierto bajo el agua! Cuando dos de nuestros empleados partieron a un viaje de trabajo para realizar el mantenimiento a un sistema de antenas localizado en el desierto colombiano, de repente los atrapó una lluvia torrencial.

Después de varios días de trabajar en el desierto, el clima aún no mejoraba y las provisiones empezaban a escasear. ¡Una cosa estaba clara ahora. ellos necesitaban ayuda inmediatamente!

Afortunadamente nuestros colegas sabían de un pueblo indígena cercano. Entonces se desviaron de las directrices de procesos de Rohde & Schwarz y se encaminaron hacia una ranchería.

La gente del lugar vio que estaban desesperadamente necesitados de ayuda y les ofrecieron una cabra. Y como les quedaba casi nada, comieron cabra todos los días. Por ocho días seguidos.

Al final, nuestros empleados llegaron a casa sanos y salvos. Pero una cosa es cierta: fue un viaje que no olvidaran pronto.

Un duro comienzo

Los problemas se presentaron desde el inicio. Lo que debería haber sido inicialmente un viaje de 10 horas en carro hasta el sistema de antenas terminó tomándoles el doble de tiempo. La razón: lluvias torrenciales. Después de cinco día de trabajar en el desierto, el clima aún no había mejorado y una cosa era clara - era ahora una cuestión de vida o muerte!

Las lluvias torrenciales en combinación con una carretera en pésimas condiciones significaba que nuestros dos empleados estaban aislados del mundo exterior. Y ahora sus provisiones cuidadosamente calculadas se estaban agotando, solo durarían como mucho tres días más.

Sobreviviendo en un pueblo indígena

Mientras continuaba lloviendo torrencialmente, ellos se registraban con la sucursal cada pocas horas por teléfono, como se indicaba en sus directrices de procesos. Eventualmente sus provisiones, cada vez más escasas, no les dejaron otra opción y ellos tomaron una decisión. Se desviaron de las directrices de procesos de Rohde & Schwarz y se encaminaron hacia una ranchería – uno de los pueblos indígenas que ellos ya conocían .

La gente del lugar vio que estaban desesperadamente necesitados de ayuda y les ofrecieron una cabra. Una cabra viva. Y no era gratis. Entonces ellos juntaron todos los pesos que tenían para comprarla. Y como no les quedaba casi nada más, comieron cabra durante ocho días seguidos. Para el desayuno. Para el almuerzo. Para la cena. Incluso recolectaron agua de lluvia para beber, cocinar y lavarse.

Reclamando gastos de una manera creativa

Una vez solucionado el problema de su supervivencia, empezaron a reflexionar: ¿Cómo íbamos reclamar los gastos por la compra de esta cabra aquí en el desierto Su inusual situación exigía un poco de creatividad de su parte y flexibilidad de sus colegas en el departamento de viáticos: ellos aceptaron fotos del antes y después como documentación de sus colegas aventureros, en la primera se mostraba la cabra aún viva y en la segunda la cabra lista para comer.

La nueva antena de transmisión implementada probó ser eficiente. Y también nuestros empleados, quienes dominaron esta extraordinaria situación con valor. Una cosa es cierta: los ingenieros de Rohde & Schwarz raramente tienen que probar sus habilidades de supervivencia en su vida profesional.